Las Cihuateteo
Dentro de la mitología mexica, unas mujeres espectrales que lloraban las cuales se decia eran enviadas del mictlan (inframundo) eran las Cihuateteo, a veces llamadas Cihuapipiltin.
Estas mujeres eran espíritus femeninos hermanas de los dioses de los excesos (Macuiltonaleque), las cuales habían muerto al dar a luz, ya que se consideraba que el parto en si es una batalla, por lo cual acompañaban y guiaban a los guerreros al cielo.
Sin embargo, cuando llegaron los españoles, se mezclaron las creencias, modificandola al grado de conjuntarlas con la leyenda de la Llorona.
Se decía que bajaban a la tierra y causaban estragos, es decir, volvían al mundo de los vivos para apresar a los viajeros en la noche, en los cruces de caminos y a veces encantaban los templos.
Comúnmente se les representa como seres pálidos, con vestimenta de encaje y con semblante esquelético, con garras de águila en vez de manos, tal como las describe Fray Bermardino de Sahagún.
Para evitar problemas con dichos seres, se les colocaban altares con pan en los cruces de caminos, lo cual se decía era su ofrenda favorita.